Agradecemos al Ing. Érik Castañeda De Isla Puga permitirnos reproducirles una de sus colaboraciones para el Boletín Matemáticas y Cultura que se publica internamente en la Facultad de Ingeniería de la UNAM. Por su extensión se las presentaremos en dos entregas.
Una de las bellas artes es la música, para mí la más bella de las artes. Bien sabemos que al escuchar una melodía o una canción su efecto puede ser el transportarnos en el tiempo y en el espacio. Una pieza musical puede hacer que recordemos a una persona amada, algún acontecimiento importante, o todo lo contrario, un hecho desagradable o algún sujeto que nos retorcía el hígado con su presencia. Hoy día también se le atribuyen a la música, efectos curativos o ser una buena ayudante en el aprendizaje. En lo que sigue intentaré describir algunas historias relacionadas con selecciones musicales. El objetivo es reflexionar en los compositores o en las situaciones que motivaron su creación. Debo aclarar que lo que referiré no ha sido verificado, ni creo que se pueda en muchos casos corroborar; es decir, si esta fuera una nota periodística, no tendría validez como para afirmar que es totalmente veraz. Algunas de estas historias las he escuchado en la radio o en programas televisivos, otras las he leído en algunas publicaciones escritas en libros, periódicos o más recientemente en páginas de la red. Es muy probable que algo de lo que se dice haya sido cierto pero como sucede cuando nace una leyenda, al contarse el cronista le aumenta de su cosecha algo para hacerla más espectacular. Por ello, no deben tomarse como verdad absoluta. Comenzaré hablando de quien en mi gusto o criterio, ha sido el ser humano que ha creado la música alcanzando casi la perfección:
Nosotros de Pedro Junco (1920-1943) Se trata de un bolero que ha sido grabado innumerables veces. La historia de su creación también es trágica y está nuevamente relacionada con la muerte. Se dice que el bolerista cubano Pedro Junco enfermó gravemente de tuberculosis y que al saber que su final era inevitable y muy próximo, dedicó esta canción a su novia. Con esto pueden comprenderse las frases “Debo decirte algo que quizás no esperes, doloroso tal vez …Nosotros, que nos queremos tanto, debemos separarnos, no me preguntes más … “ Se menciona que la canción fue grabada, se convirtió en éxito y poco después falleció su autor.
La Chica de Ipanema de los brasileiros Antonio Carlos Jobim (1927-1994) y Vinicius de Moraes (1913-1980). Esta selección tiene una historia bastante curiosa. Por allá por los inicios de los años sesenta, se reunían casi diario en el Café Veloso en las playas de Río de Janeiro, entre otros amigos, el poeta Vinicius de Moraes y el músico Antonio Carlos Jobim o Tom Jobim como también se le conoce. Se menciona que frecuentemente pasaba cerca de dicho café una escultural chica (17 años) Heloisa Eneida Menezes Paes Pinto (nacida en 1943), dirigiéndose a la playa en donde acostumbraba tomar el sol. Ella fue la musa que inspiró a los artistas para componer esta canción que en las referencias se menciona como una de las más escuchadas y grabadas por muchos artistas y en incontables idiomas. Lo curioso del asunto es que al ser grabada, de inmediato se hizo popular en Brasil y quien la había inspirado la cantaba sin saber que su belleza había sido el motivo de su composición. Cerca de tres años después y cuando la popularidad ya era internacional, se hizo público el nombre de la joven a quien ofrecieron de inmediato el ingreso a la industria del espectáculo, pero su padre era un general de ideas muy conservadoras y su novio, posteriormente su esposo, muy celoso y juntos, le impidieron la aceptación de dichas ofertas. Para que el mundo conociera esta selección también se describe otra situación singular: El saxofonista norteamericano Stan Getz (1927-1991) estaba empeñado en introducir al mercado norteamericano el género musical que estaba de moda en los países latinoamericanos, el bossanova. Para ello, invitó a algunos artistas brasileiros a grabar esta canción. Entre ellos Joao Gilberto, excelente guitarrista y cantante; sin embargo, el problema que veía Getz es que Gilberto solamente cantaba en portugués y se consideraba que para atrapar el gusto de los norteamericanos era necesario que esta música fuera interpretada en inglés. Joao sugirió entonces que su esposa Astrud Gilberto (nacida en 1940), quien hablaba correctamente el inglés, podría grabarla, aunque ella no era cantante profesional. Al escucharla, Stan Getz dijo “Esta chica no canta ni el Ave María” No obstante esta opinión, los músicos lo convencieron de que su voz se escuchaba muy bien. Finalmente la canción fue grabada y se convirtió en un éxito extraordinario que logró la introducción de la música brasileira a Norteamérica y, con ello, a todo el mundo, además de abrirle las puertas a Astrud Gilberto convirtiéndola en una cantante muy popular hasta nuestros días. Se dice que Astrud se separó de Joao y se unió a Stan, sin llegar al matrimonio. Esto último sólo lo escuché alguna vez en la radio y no he podido encontrar otra referencia, por lo que queda en el terreno de la especulación.
Hymne à l’Amour de Edith Piaf (1915-1963) A esta mujer se le considera la cantante popular más importante en la historia musical gala. Se le llamaba “El Ruiseñor de Francia” Tuvo una vida muy tormentosa desde su infancia. Hacia los finales de la década de los cuarenta, mantenía una relación amorosa con el boxeador argelino radicado en Francia, Marcel Serdan (1916-1949). Durante una gira artística que realizaba Edith por Nueva York, Marcel tuvo que permanecer en Europa para cumplir con un compromiso pugilístico. Al terminar el combate, de inmediato se dirigió al aeropuerto de Orly para embarcarse con rumbo a Nueva York y así reunirse con Edith; sin embargo el destino tenía otros planes y el avión se accidentó ocasionando la muerte de Marcel. La noticia fue impactante para Edith, quien escribió el “Himno al Amor”(Hymne à l’Amour”) como recuerdo y en honor de Marcel. La canción alcanzó enormes niveles de popularidad y ha sido interpretada por muchos artistas de talla internacional. Fue traducida al inglés y se conoce como “If you love me really love me” aunque lo que se dice en inglés se aleja de lo que quiso decir el corazón de Edith Piaf.
Bésame Mucho de Consuelo Velázquez (1916-2005). Ésta es quizás la canción popular mexicana más conocida y, por lo tanto, más grabada y escuchada en todos los rincones de nuestro planeta y en todos los tiempos. Hay grabaciones de The Beatles, de Frank Sinatra, de Julio Iglesias, etc. Incluso el ídolo más importante que ha existido en el espectáculo en México, Pedro Infante, la grabó en español y en inglés. Lo que la misma Consuelito, como se le conocía cariñosamente, decía, es que la compuso a los 19 años cuando ella no había besado aún a nadie.
Se Te Olvida o La Mentira de Álvaro Carrillo. El ingeniero oaxaqueño Álvaro Carrillo (1921-1969), egresado de Chapingo, desde muy temprana edad tenía como afición la música y ya mostraba sus dotes de compositor. La popularidad le llegó cuando Pepe Jara “El Trovador Solitario” (1928-2005) se convirtió en su intérprete. Álvaro escribió la canción de referencia y la tituló “Se Te Olvida”, solamente que la vida dio un vuelco y la llevó por un camino insospechado. Durante un viaje de Carrillo, en su ausencia y por solicitud de Ernesto Alonso “El Señor Telenovela” (1917-2007), Pepe Jara le presentó dicha canción para ser utilizada como tema de la telenovela “La Mentira” que estaba en producción. Al escucharla, Alonso se entusiasmó con ella pero quiso que se grabara con el nombre de la telenovela. Pepe Jara aceptó, considerando que esto le abriría las puertas de la popularidad a la música de su amigo Álvaro pues ese género de historias de televisión era devorado por el público televidente, así que sin el consentimiento del autor el título fue cambiado.
Pensaba en ti de Enrique Guzmán (Caracas, Ven. 1943). Enrique entró al mundo del espectáculo como vocalista de un conjunto de rock and roll, Los Teen Tops. Con su voz se hicieron populares una cantidad considerable de selecciones: El rock de la cárcel, La plaga, Confidente de secundaria y un largo etcétera. Antes de convertirse en ídolo juvenil, quizás el más popular de ellos, su papel como vocalista del grupo lo hizo muy conocido entre los jóvenes de aquella época. Él mismo cuenta que durante una actuación conoció una chica muy hermosa que parecía haber caído en sus requerimientos amorosos; sin embargo, al paso de muy poco tiempo, la chica ya estaba cariñosa en los brazos del guitarrista del mismo conjunto, Jesús “Tutti” Martínez (México, 1942). Lleno de desilusión, Enrique se dio a la tarea de escribir la canción “Pensaba en ti”, aun cuando él en sí no es compositor. En la letra de dicha selección puede notarse el despecho del artista:
“…supiste cómo actuar, lo hiciste bien
Ya vuelves a tratar, no sé ahora con quién
A mí sólo me queda algo de hiel” …
“Yo no puedo mentir, bonita eres
Serías digna mujer de un gran marqués,
Sólo un problema hay, caray
Que ese marqués no quisiera ser yo”.
“…supiste cómo actuar, lo hiciste bien
Ya vuelves a tratar, no sé ahora con quién
A mí sólo me queda algo de hiel” …
“Yo no puedo mentir, bonita eres
Serías digna mujer de un gran marqués,
Sólo un problema hay, caray
Que ese marqués no quisiera ser yo”.
Solamente una vez. Agustín Lara (1897-1970) es, sin lugar a dudas, el más notable compositor de música popular mexicano. Su repertorio es conocido prácticamente en todo el mundo. Su obra es muy extensa y variada y existen muchos mitos y leyendas alrededor de su imagen. Incluso no hay certeza ni de la fecha de su nacimiento ni del lugar en donde vio la primera luz. Él se declaraba nativo de Tlacotalpan, Veracruz; sin embargo hasta se han mostrado copias de supuestas actas de nacimiento en las que se señala como origen al Distrito Federal. Lo cierto es que la duda persiste pues estas “evidencias” han sido diversas con distintas fechas de nacimiento y signadas por varios representantes de la ley. No olvidemos de que su nacimiento se sitúa hacia finales del siglo XIX o principios del siglo XX y no se tenía una muy buena organización en los registros civiles. Independientemente de esto, el conocido como “músico, poeta” se convirtió de un ignorado pianista de burdeles al compositor popular más importante no sólo de México, sino de Iberoamérica. Se dice que el tenor José Mojica (1896-1974) de manera inesperada anunció su retiro del ambiente artístico en el cual estaba teniendo un éxito considerable, para recluirse en un convento. La noticia fue demoledora y cayó como una bomba entre sus admiradores y seguidores. Es entonces que “el flaco de oro”, como se conocía a Agustín Lara, decide escribir “Solamente Una Vez” dedicada a Mojica y a su vocación. Al escuchar las palabras escritas por Lara, puede pensarse que están dirigidas a una mujer que representa el único y más grande amor: “una vez nada más se entrega el alma, con la dulce y total renunciación. Y cuando ese milagro realiza el prodigio de amarse, hay campanas de fiesta que cantan en el corazón …” Ahora bien, cuando se conoce el motivo por el que se escribió se entiende perfectamente que sí puede tratarse de la vocación sacerdotal. Es notable como el manejo del lenguaje de Lara consigue que la canción también pueda utilizarse para declarar un amor apasionado más terrenal. Para terminar con este comentario, José Mojica se convirtió en Fray José de Guadalupe y dejó definitivamente la farándula en el plan profesional, aunque por solicitud de sus superiores se presentó en diversos recitales como parte de obras de caridad o para recabar fondos.
Penélope. La música de esta selección fue compuesta por el músico catalán Augusto Algueró (1934-2011) y la letra por el también catalán Joan Manuel Serrat (1943). La intención de Algueró al escribir esta pieza era su participación en el Festival Mundial de la Canción de Río de Janeiro.en el año 1969. Para su presentación se pensó en Serrat como interprete ya que empezaba a ganar celebridad en Europa. El representante de Serrat lo consideró adecuado pues con ello podría ingresar al público de América, solamente que faltaba poco para la celebración del festival y la canción no tenía letra. Por ello Serrat confiesa que Algueró lo encerró para que sin distracciones ni dilaciones, dedicara tiempo completo a la terminación de la susodicha letra. Finalmente la canción fue premiada y también se consiguió que Serrat fuera conocido en este lado del mundo. Sin embargo, esta selección trajo dos consecuencias. La primera para el mismo Serrat quien con esta participación agrandó la grieta que se había formado entre él y sus seguidores catalanes quienes no le perdonaban su intervención en otro festival, éste el de Eurovisión en 1968 con la canción La, la, la; pues la había interpretado en castellano y había grabado en este mismo idioma. No olvidemos que en España existe aún y así ha sido por siglos, un regionalismo feroz. No siempre entendemos, por ejemplo, que en el llamado “clásico español de futbol” entre los poderosos equipos Barcelona Y Real Madrid, no solamente interviene una rivalidad deportiva sino que va mucho más allá. En la época en que se presenta Penélope en Rio todavía estaba en el gobierno español Francisco Franco (1892-1975) que con actitudes dictatoriales había incrementado este tipo de problemas. Serrat intentando aminorar estas reacciones, después de haber participado en Eurovisión, grabó la misma selección La, la, la, en catalán pero lo que consiguió fue que esta interpretación fuera vetada por la radio española. En fin que con el paso del tiempo Joan Manuel ha recuperado a muchos de sus seguidores catalanes pero aún los más recalcitrantes lo consideran un traidor. La segunda consecuencia que trajo Penélope fue que muchas niñas españolas que nacieron en esa época fueran bautizadas con ese nombre, entre ellas la actriz hispana más conocida en nuestro tiempo Penélope Cruz (1974- ) ganadora de un premio Óscar en 2008 por la película Vicky Cristina Barcelona.
Tiempo. La canción a la que me referiré es conocida por la interpretación de Marco Antonio Muñiz “El Lujo de México” (1933 - ) y José José “El Príncipe de la Canción” (México, 1948). El origen de ella es un poema escrito por Renato Leduc (1897-1986) como motivo de un reto. Se dice que en una clase en la Escuela Nacional Preparatoria, un compañero de Leduc y él se escribían una palabra o una frase con la que se debía completar un poema. A Renato le dieron una hoja con la palabra “tiempo” y terminó la clase sin que él pudiera hacer algo. Quien sugirió la palabra se burlaba pues le decía que estaba comprobado que dicho vocablo no rimaba con ninguno otro en el castellano. Leduc se sintió retado y comprobó que, efectivamente, tiempo no tiene rima con ninguna otra palabra; sin embargo, con un enorme ingenio compuso un poema en el que hace rimar dicho vocablo tiempo consigo mismo, poema que algunos años después musicalizó Rubén Fuentes (1926 - ) para que después de un “tiempo” fuera grabada por los dos artistas ya mencionados, convirtiéndola en un éxito.
En fin, detrás de la música existe el ser humano que la creó y es muy interesante cuál fue la motivación para llevar al papel pautado su inspiración. Lo que aquí presento es una pequeña muestra de las historias adheridas a selecciones musicales que nos han hecho vibrar. Como he mencionado, algo de lo aquí referido debe haber sucedido y algo también debe haber sido aumentado por quienes lo contaron. Lo cierto es que existen seres humanos con talento suficiente para componer música en la que va impregnado el sentimiento de sus creadores.
Muchas gracias por esta aportación Erik. Tu ex-alumna que te aprecia, Ana Ma. Contreras.
ResponderEliminarExcelente Blog, felicito a los autores, lo he puesto en favoritos pues deseo leerlo completo.
ResponderEliminarAna:
ResponderEliminarSeguramente nuestro buen amigo Érik estará muy contento de leer tu mensaje. Gracias.
Roberto:
Agradecemos que nos coloques dentro de tus blogs favoritos, esperamos que así sea por mucho tiempo.